domingo, 9 de octubre de 2016

Superando nuestro miedos

Todos tenemos miedos, eso es una cosa indudable, y lo peor es somos nuestro mayor miedo, porque no somos capaces de vernos con buenos ojos, siempre esperamos a la aprobación de los demás y nunca tenemos en cuenta lo que queremos. Existen millones de miedos, desde fobias, hasta mostrarnos tal y como somos, todo eso no solo nos produce esa situación desagradable, si no que a largo plazo si inevitablemente estamos expuestos constantemente a ese miedo por ejemplo hablar en público siendo vendedor pues nos producirá ansiedad, estrés incluso depresión.

Para superar nuestros miedos, lo primero es reconocerlos y aceptarlos, saber que están ahí, no hay ninguna razón para negarlos, incluso hacerlo es mucho peor, si queremos afrontar algo tenemos que saber el qué  queremos afrontar, aunque parezca tonto es el paso más importante para superarlo, tienes que entenderlo, saber de dónde proviene y donde aumenta, la información es poder, y si sabes a que te enfrentas podrás con todo, porque tendrás todas las herramientas necesarias, ya que tienes detalle de la situación.

Una vez identificado empecemos a jugar con nuestro cerebro, imagínate una vida sin ese miedo, si tienes miedo al público imagínate siendo el mejor orador de todo el mundo, experimenta esa sensación de felicidad sin él. Repite esto varios días, sintiéndolo, imaginado esa situación ideal, una vez que lo hagas, que tienes un buen pensamiento, trata de superar ese miedo, quizás no sea a la primera pero hay que ir dando pequeños pasos de gigante, tienes que tener en cuenta que la mayoría de nuestros miedos son el resultado de falsas creencias, por ejemplo creemos que no hablamos bien, que la gente se aburriría, o que hablaran de nosotros, cuando la realidad es que muchas veces ni siquiera están detallando con exactitud lo que estamos haciendo.

Tener miedo es bueno, es una respuesta humana para la supervivencia pero no puedes dejar que este te paralice cuando sientas que se eta apoderando de ti, toma una pausa y piensa en los riesgos reales de la situación, veras que de manera lógica son mucho menores a lo que te estas imaginando, empieza a usar tu medio como una herramienta, es decir como algo que te ayude a ir con cautela pero no un impedimento, más bien una ventaja, algo bueno.


Recuerda que el coraje no es la ausencia del miedo, si no el conocimiento de que hay algo más importante que aquello que te asusta...


No hay comentarios:

Publicar un comentario