Si por una derrota te rindes, nunca disfrutaras del sabor de la victoria, quizás
desde pequeños en vez de dejarnos siempre ganar, tendríamos que aprender que no
esta tan malo perder, que el truco no es llegar siempre de primero si no saber
llegar, los sueños no tienen fecha de caducidad pero si te rindes no sabrás si podías
lograrlos o no.
Sé que los cuentos de hadas no existen, solo hay pequeñas historias que al
escucharlas nos devuelven la fe, pero si en vez de poner tanta fe en que los
milagros sucedan, la pusiéramos en nosotros y nuestra voluntad, conseguiríamos más
de lo que imaginamos, y es que es necesario equivocarse para saber que tienes
que rectificar, que la vida sería monótona si no tienes un poco de variedad. No
todo se gana, en realidad el ganar o perder es una cuestión mental, nosotros
decidimos que perdemos y que ganamos y eso nos lleva a tener miedo porque si
por ejemplo decidimos apuntarnos en una carrera y corriendo te haces un esguince
pero decides acabarla quedando de último, he aquí la doble cara de la moneda,
para todos perdiste, no tienes un primer puesto, ¿pero en realidad es un
fracaso absoluto?, la verdad es que hay una victoria la de superar el obstáculo
que te impedía continuar por lo cual ganaste, ¿entiendes?, no existe victorias
o derrotas absolutas es como nuestro cerebro vea y decida aceptar las situación.
El éxito no es eterno, nuestra vida es una montaña rusa así que respira
todo lo que puedas en la subida para soltar de un grito toda la adrenalina y así
una y otra vez te dará la vuelta, te hará subir y bajar, es cuestión de ver la diversión
cuando no encuentras respuesta, a veces deberás pensar, pero una vez empiece la
aventura hay que dejarse llevar.
Así es la vida pequeños momentos que harán grandes recuerdos, sin nada
absoluto, no hay verdades, no hay mentiras todo absolutamente todo es cuestión
de perspectiva, mi consejo disfruta hoy y no pienses tanto que mañana será un nuevo
día, con sus historias, sus victorias y fracasos, pero teniendo sueños y nuevas
metas que reconstruyan todo lo palo que dejo el dolor en su paso.
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