No siempre las
cosas suceden como nos las imaginamos, a veces toman otro rumbo u otra
dirección, no tiene que haber un motivo o razón lógica, no siempre es nuestra
culpa quizás solo sucedió sin más, sin ningún motivo, sin ningún por qué, pero
en vez de lamentarnos tenemos que aprender de ello, tenemos que hacer que el
viento sople a nuestro favor, y quedarnos solo con lo bueno.
Todos tenemos un plan de vida, como si fuéramos maquinas que pueden valerse
de un itinerario, pero ese plan de vida, sufre cambios, modificaciones las
cuales no contamos, soñamos con estudiar, graduarnos, conseguir un buen
trabajo, encontrar a esa persona a la que amar, casarnos, tener hijos y así la
historia de una vida totalmente feliz pero no hay nada más alejado de la
realidad de repente te ves con que la carrera no te gusta, o la acabaste pero
por la situación del país estas en paro, no conseguiste esa persona especial,
te engañaron o te divorciaste porque las expectativas superan la realidad, de
repente te convertistes en madre soltera y te das cuenta de que no todo es de
color de rosa. Entonces….¿que vas ahcer? Ese itinerario ya no te sirve te toca
improvisar, echarle imaginación y un poco de ganas porque ahora es que comienza
tu vida, no puedes lamentarte por lo que no es, no hay tiempo para eso, es hora
de actuar. Mi padre suele decir que hay dos tipos de personas en este mundo,
seguro no es de el, quizás lo leyó pero la cosa es que la frase es válidamente
aplicable, tienes que decidir en que bando estas, entre las personas que
esperan que sucedan las cosas o las que hacen que sucedan, si estas en el
primer grupo quizás eres de los que vayan a lo seguro pero si partes de la base
que en esta vida no hay nada seguro y que el que no arriesga no gana te daras
cuenta que por ese camino seguramente fallaras o veras pasar miles de
oportunidades que a lo mejor eran igual de buenas o mejores que la que estabas
esperando que sucediera, ahora bien puedes ser del segundo grupo , los que
hacen que las cosas sucedan, si estas ahí, ¡enhorabuena!, porque tu tienes el
timon de tu destino, estas haciendo que suceda aquello que tanto anhelas y no
estas esperando que te llegue por arte de magia, pero tranquilo que todo en
exceso es malo a veces para triunfar tenemos que ser un poco de ambos bandos,
porque no es bueno saber esperar, porque no todo sale como esperamos pero lo
que no puedes es quedarte en stand by tienes que estar en continuo movimiento,
barajeando todas las posibilidades incluso cuando sabes que vas a vencer, ya
que nunca se sabe cuando un cambio de viento puede modificar tu dirección. El
destino tiene pendiente unos movimientos para ti pero solo tu podras saber
como, cuando y donde puedes hacerlo, es bueno seguir a tu isnitnto, no siempre
acierta pero es lo que tu quieres realmente y eso es importante, y escucha a la
razón que te dara el pistoletazo de salida para esta gran carrera contra ti
mismo donde la unnica forma de ganar es apostando y poniendo toda la pasión a
aquello con lo que tanto sueñas.
No pierdas ni un
solo instante, y si jugaste mal tu carta, simplemente perdónate sin olvidar tus
fallos y empieza una nueva estrategia, no veas el año como una sola
oportunidad, ve más bien 365 oportunidades que a veces es necesario tan solo
cambiar la perspectiva y siempre recuerda que aquello que ves como una historia
acabada, quizás tan solo sea el borrador que dará paso a la gran historia que
aun tienes que contar, por eso equivócate, falla y vuelve a fallar que para eso
está la vida para equivocarse y aprender de ello, si fueras perfecto
seguramente no serias humano, y las vidas perfectas no existen porque lo
interesante es romper con la monotonía, que por más que estudies nadie te
enseña que es vivir, o como tienes que ser para ser feliz, todo son guías pero
nadie conoce la verdad de cada uno, por eso es necesario que te equivoques una
y otra vez hasta que seas capaz de encontrarte a ti mismo, encontrar la verdad
que tanto buscas, si no lo haces tarde o temprano te arrepentirás
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